Bodas Negras

Oye la historia que contome un día el viejo enterrador de la comarca: Era un amante que por suerte impía; Su dulce bien le arrebató la parca.

Todas las noches iba al cementerio a visitar la tumba de su amada, la gente murmuraba con misterio; Es un muerto escapado de la fosa.

En una horrenda noche hizo pedazos el mármol de la tumba abandonada, cavó la tierra y se llevó en sus brazos el rígido esqueleto de su amada.

Y allá en la triste habitación sombría, de un cirio fúnebre a la llama incierta ,sentó a su lado la osamenta fría y celebró sus bodas con la muerta.

Ató con cintas los desnudos huesos, el yerto cráneo coronó de flores, la horrible boca la cubrió de besos y le contó sonriendo sus amores.

Llevó a la novia al tálamo mullido, se acostó junto a ella enamorado y para siempre se quedó dormido, al rígido esqueleto abrazado.


(Un día nos juntamos los amigos, entre charlas y charlas... Surgió la anécdota de un hecho de necrofilia, algunos no sabían de que se trataba bien, otros dudaban y otros teníamos la certeza de hablar con seguridad. Pero como siempre en este grupo el desacuerdo y la contraposición de ideas. Y como siempre, la salvación: La internees! Entonces una encontró esto, lo publico en su blog, otra fue se lo robo e hizo lo mismo, el otro le puso ácido y al final todos nos reímos.)